martes, 13 de marzo de 2012

Amor

Solo te pido que no desaparezcas. Que estés a mi lado el tiempo que haga falta... Que esperemos que sea largo, y no corto. Que quiero que sepas que eres lo más grande que he podido encontrar, y que no me esperaba encontrar. Que ni la distancia, ni las pocas veces que nos podamos ver en persona cambiara lo que siento por ti en tan poco tiempo, a lo contrario, aumentará. Porque hay que seguir firmes, hay que confiar y no desconfiar en que uno espera, y no caiga en trampa de demás personas. Quiero que nunca cambies esa nueva faceta de levantarte con una gran sonrisa, y esa otra de irte contento aunque cansado por trabajar o mil cosas que hayas podido hacer, y irte ha la cama ha dormir. No quiero que venga otra y le de por descubrirte, le de por descubrir lo que yo he descubierto en ti, y lo que no quiero perder... Por eso te lo repito y te lo repetiré mil veces porque es que ¡joder! (perdón por la mala palabra) tengo miedo, y no poco. Porque en realidad te estoy conociendo y tu me estás conociendo, no quiero que cambies, ni quiero cambiar. Quiero que seamos un nosotros, que haya confianza entre nosotros y que nada ni nadie consigue separar esto que nos une. 
Necesito de ti, como el pez que necesita agua, como el cielo del sol y la luna, necesito tus besos y mimos para seguir pensando que el futuro puede ser como el presente, pero no tan duro.
Me gusta tu sonrisa, me agrada escuchar tu risa... 
Te cuento amor, mis sueños han sido simples y sencillos, nada del otro mundo. Paseos por los sitios más bonitos que pudiéramos imaginar, sonrisas y besos que no tuvieran fin, momentos dulces y relajados donde rodeados de música diéramos rienda suelta a nuestro amor, largos y eternos días con la persona que quiero.
La relación entre dos personas es un trabajo diario, que aunque lento, se hace necesario. No hay cáncer más benigno que aquel que dejamos que nos invada, podemos luchar o dejarnos morir, esforzarnos o abandonar, ilusionarnos o hundirnos, caminar o parar.
Esto tiene que significar un antes y un después.
Quizá la perfección en el amor no exista o la mayoría de los seres humanos no hayamos creído en ella, aun así estoy seguro que muchos "locos o místicos" abran muerto buscando su origen, disfrutando de aquello que buscaban y sabiendo aprovechar las pocas luces de una búsqueda infinita y dura.
Mi perfección eres tu, lo sabes ¿ no ?, no cambiemos de opinión por favor!

Infinite.

No hay comentarios:

Publicar un comentario